miércoles, 25 de diciembre de 2019

En plena Navidad. Dan igual las fiestas, rituales y fechas varias dispuestas en el calendario por nosotros, bípedos implumes. Esa sensación de que es otro quien me suplanta y vive mis días; relampagueantes momentos de ausencia, salida fantasmal del cuerpo y activación del piloto automático.

Modalidad de conversador con acciones motoras e intelectuales elementales, y con una cucharadita de complejidad, (El asistente Siri algo más actualizado) en botón on: Asiente, ladea la cabeza, interviene parcamente y devuelve "meditadamente" las preguntas, pero lo cierto es que, no se está usted dirigiendo a la identidad que activamente, lúcidamente debiera ocupar el sujeto en cuestión.

La recurrente marcha hacia lo nebuloso ¿dónde estoy yo? Un sentimiento harto consciente, extendido como la alfombrada hierba en los dilatados valles, laderas montañosas y liquenosos bosques.

lunes, 23 de diciembre de 2019

La vida es como una película u obra teatral. El sentido aparece porque cuenta con un final. Mientras este no se produce, la tensión, interrogación e intriga devoran todo el evento.

viernes, 20 de diciembre de 2019

Mi idea del tema de la compasión: 
Si a la compasión le acompaña una idea alegre (voluntad fuerte) del afecto, no meramente triste. Es decir, sin contagio del sufrimiento y dolor o bien transformándonos exclusivamente en éste, con su padecer y colmación de tristeza (pasividad) del ánimo. 
Entonces, el individuo que ha dominado (no involucrándose en exceso y por medio del análisis del afecto concreto, evitándose la embriaguez pasional) el efecto lastrante de la compasión, en cualquier circunstancia, se preocupa y alegra por los demás; busca hacerles el bien mediante dicha razón-deliberación y solidaridad (prudencia) afectiva. 
La conmiseración desde el interés (acción, voluntad interna) en obrar, tomada como molde e invertida gracias a la operación racional, queda tornada en acción- sentimiento de "benevolencia razonada" o autoconsciente y en sinonimia con el calificativo "crítica" (desear lo bueno tanto para sí como el resto de personas), luego ubicada dentro de los parámetros de la empatía (em-pathos, emocionarse con, sentir con el otro y sin verse perjudicado en lo tocante a su capacidad de acción).

jueves, 19 de diciembre de 2019

En un principio, podría sostenerse que el libro obra como el alcohol para alejar las penas. La diferencia estriba en que, la lectura forma nuevas redes de neuronas, mientras que el consumo de bebidas etílicas las matan, al tiempo que desintegran tu propio ser por el camino cual estado amnésico sine die (sin fecha).

En cualquier caso, la mejor conmiseración, consuelo, apoyo, respaldo, comprensión, escucha, estima, compasión, condolencia, sanación, curación, oxigenación, des-traumatización, desbloqueo, vigorizante, antídoto, remedio, catarsis, expulsión, desahogo, vómito, mayéutica [...] Prosigue:

Salvación, rescate, exorcismo, auxilio, desenredo, des(a)nudar, socorrer, cuerda tendida (justo para no ahorcarse, a lo que sí contribuyen taimadamente los timplazos de encarecido whisky, o garrafón cuando ya reviste nula preocupación la clase de elixir ingerido enfermante del hígado y responsable de vergonzantes cantos guturales), pañuelo de lágrimas, voz acolchada, mano en el hombro, presionar la palma herida y así sucesivamente.

En la relación y com—penetración bibliográfica (penetrar con las palabras y eróticamente, con amor erradicar el punzante dolor del otro. Cuanto tiene que aprender aún la basta pornografía acerca del sentido y significados bellos de fusión en el sexo ), se remonta el lenguaje a la época griega, con conceptos clásicos marchitos en nuestro tiempo, tales como pathos, eros, philia, areté, agápe...

Toda esta previa melodía de inacabados sinónimos de aire benevolente y aromas a (extraviada) humanidad, proviene de un "amigo de hojas tintadas y simbólicas"—el caldo del arjé, los dioses y su creación— y no de la engatusadora, adictiva—viciosa, nihilista y adormecedora "cicuta intelectual" (Barney Gumble infeliz testigo del marcado deterioro, corrupción e involución de hombre a bestia en primera persona ), envasada en —a la ilusoria vista—inofensivo vidrio o aluminio.
Ser nihilista y misántropo entraña una contradicción, pues la misantropía debería verse destruida-negada  por el pensamiento nihilista.


martes, 17 de diciembre de 2019

A la muerte se la ama y aborrece al mismo tiempo. Tiene lugar un apego a la vida y un ansia por caer en el inmutable sueño eterno algún día. Vivir termina por agotar, pero cuando todavía la salud resiste con mano de hierro y la sangre hierve, nadie clama —¡¡¡Quiero marcharme de aquí!!! Resuena en las calderas internas la estridente sinfonía de "proyectos por cumplir, una obra ejecutar y una huella en la arena del tiempo dejar"...

domingo, 15 de diciembre de 2019

La vida es un dulce vino, al que se le ha inoculado un lento y disimulado veneno. Hora tras hora, nuestro inocente organismo va siendo colonizado y debilitado; un crimen orquestado por la naturaleza. De este punto, se deriva el goce de los dorados y secretos—una nebulosa temporal— minutos antes del culmen de la fatal infección.
Los creadores acostumbran a ser los maldecidos. Se necesita del desprecio ajeno para engendrar obras, que acallen a la masa de corazón de piedra. El ostracismo, al que se ve obligado el paria, obtiene su pago con la sublime y muda venganza en el arte. En sus caóticos muros resuena su burla de la incomprensión. Los espectadores se avergüenzan de su familiaridad con los rumiantes y en la experiencia estética abrazan la compasión con el sufrir propio y ajeno. Dirigen su conciencia a las fuliginosas bocas de la imaginación estética. Les descose, quebranta, acongoja, abruma, enternece, envilece contra su amada figura, etc. El mundo adquiere la verdadera forma. El creador, el apartado, desterrado y marginado—el otro—es el animal que entrega—comparte los ojos, oídos, boca y demás sentidos para contemplar la esencia perdida de las cosas...

miércoles, 11 de diciembre de 2019

La oscuridad, verosímilmente, puede bañar el túnel mental por un largo letargo temporal y súbitamente la inspiración, naciente de una zona subterránea de las tinieblas, alumbrar la salida; la retina recapta la silueta de los frondosos y esmeraldados bosques bajo un cielo huérfano de nubosidad.

lunes, 9 de diciembre de 2019

Detesto la falsa alegría por encima de todas las cosas. Aquella con cara idiotizante de autofingimiento y pretensión de maquillar, con aglutinante sonrisa, las cicatrices del corazón. La de la ignorancia, acerca de la desgracia certera por causas anteriores, completamente idénticas a las vividas actualmente,
y sin embargo, omitir la alarma. Hacer completos oídos sordos__al auxilio de la llamada racional__y retornar a la caída desde elevada cima, con el padecimiento del mismo daño. El enamoramiento con tintes hiperrománticos, la dependencia, aún en escenarios tóxicos, adololece de este mal.

¡¡¡Pobres infelices!!!  Me causa una insondable compasión (que no se traduce en lástima, sino en em pathos—sentir con vosotros) y rabia de justicia lacrimógena y desangrada, vuestra amarga situación. Afirmáis que la boa, con quien habitáis y os ha intentado estrangular asiduamente, lo hacía porque es su manera de ¿quereros? y quería ofreceros un abrazo, o bien determináis que sus golpes humilladores están sujetos a pretexto. Pase lo que pase, no importan el desmán o agravio, hay que perdonarles la afrenta.

—Obró sin mala fe. Me ha prometido no intentar asfixiarme futuramente, cuando nos hallemos en pleno idilio amoroso ¿qué se le va a hacer? He sido lastimado una vez más, pero yo la incité para que me atacase. Fue mi total culpa. No he cedido a su petición y deseos, sobrepasando la autonomía conferida por ella (la boa). Sus razones y derechos absolutos de reptil esgrimía, mientras que extinguidas como ser humano fallecen las mías.

Prosigue la ex-culpación:

-En el fondo, y quitando sus constantes faltas de respeto, humillaciones, cabreos si le contradigo y exhibición de insultos y descalificaciones varias. Por encima de ello, me estima-aprecia y es bueno conmigo.

Frases demasiado sonadas en la sordera de la violencia. No nos engañemos. El único responsable aquí, es el individuo maltratador, el (irre) responsable del sufrimiento y engatusador, ávido psicópata. Experto seductor, zorro cazador (con el perdón de mi simpatía por los zorros. Pido disculpas por su humanización y con este bribón ejecutar comparación) y a todas luces manipulador. Escupe, en su disculpa teatrera, palabras vanas, huecas de cariño. Apego de depredador. En exclusiva dialoga con su ego; capricho, posesión y obsesión. Nula idea de lo que significa el amor.


jueves, 5 de diciembre de 2019

Inicio de la devastadora ventisca. Los copos de fuente impura, levitan y desafían la gravedad, congelando el aire y los segundos. El asfalto adolece de hedonismo y humo canceroso, flatulencias enfermantes adheridas a la línea de petróleo fundido, atravesante de kilómetros hacia, vaya usted a averiguar qué destino, tomen el viandante o conductor.

Los fractales emisarios de las masas de nubes__Kairós (Dios del tiempo y el clima) ejercita el onanismo en las privadas alturas (Desvelada la purgante impureza)__cuyo apagado color compite con el del alquitrán reseco de la apartada carretera, no se detienen en su composición del retrato de "paisaje invernal"; imperativo categórico de la naturaleza—"el cambio climático debe morder el polvo". Juego de la oca —De polvo a polvo y tiro porque me toca. Precisamente, el polvo de incolora cocaína, granulado helado caído, declara en "secreto de confesión" la erótica guerra a la polución humana.

El visitante urbanita se encamina hacia el ojo de la tormenta de esperma; semen; palabras tabú, Freud esboza una sonrisa triunfante de emancipación de neurósis en el lenguaje. El innombrado ciudadano apaga el motor, desciende de su vehículo, ejecuta unos diminutos pasos y se detiene en seco, recibiendo en la cara la catártica y beligerante "eyaculación". La corrida, "cum" de Kairós, borra el pecado de la civilización.

J.B.B
¿Por qué estoy aquí? La única certeza, que albergo a modo de respuesta, es para perseguir la εὐδαιμονία (eudaimonia). Hoy he estado dándole vueltas al asunto ¿no nos sentimos contemporáneamente tan perdidos por la pérdida/ausencia de ese τέλος? A mi entender, habría que recuperarlo desde una singularidad, la de cada quien, que se plantea y localiza el suyo; los medios para su mejora y autorrealización. A modo de supuesto lógico y existencial, es más que viable sostener que existe una dirección o sentido y en aras de la misma, nos desplazamos y levantamos de la cama con cada salida del sol.

El existencialismo__el cual pareciera que ha re-adoptado en el imaginario colectivo la pose dominante durante las dos últimas décadas de este siglo__  e irónicamente con un destino trágico ya conferido de antemano. La marcada corriente sin ese telos, soporte, nos aboca a la angustia por un mañana borroso y sombrío como la muerte. La amargura viene por ese perpétuo habitar en la cuerda floja ¿quién soporta andar todo el tiempo con el acecho de que caerá? Es más, se autoconvencen de su malestar y lo toman por la ley, el "imperativo categórico de lo nefasto". Schopenhauer, Kafka y Cioran" dixit—La genialidad adquiere un incuestionable rostro de tristeza y promesas de mal augurio. Cita alguna figura de las nombradas (cuanto más desalentadora la frase mayor acogida) y los likes de los "fardamos de dudas, pero que no se interrogue a los paladines del pesimismo de nivel suicida", se propagarán como las plagas bíblicas.

domingo, 1 de diciembre de 2019

POEMA

Durante el otoño naciente
El joven ciervo berreaba—rogaba— al "amor"
Recibiendo decepción al frente.
En su angustioso clamor
Habitaba eternamente
La promesa de divisar
A la elegida por Eros
La luna siguiente.

Deer (El ciervo)