La aceptación de la vida, con sus sorpresas, imprevistos, evidentes decepciones, retos, superaciones, encuentros, desencuentros, reencuentros, amores, [auto]descubrimientos, viajes... En resumen, aceptar los caminos inescrutables. Esa es la clave para aprender a vivir sin amarguras, en tanto que estas son inevitables en algunos pasajes, pero también están los capítulos contrarios, como en una novela, y es cierto que desconocemos como finaliza el relato, pero mientras tanto, saboreemos su lectura.
Primera persona del singular y plural del verbo ser, anexionada al papel de narradores de la historia, pese a que somos cometas transportadas por inciertos vientos. Eso es inevitable, como también lo es que, tal como señalaba el genial profesor, El señor Keating e interpretado por el único Robin Williams, en "El club de los poetas muertos", y recitando las vigorosas palabras del poeta Walt Whitman: "que estamos aquí, que prosigue el poderoso drama y podemos contribuir con nuestro verso" ¿cuál será tu verso?
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